viernes, 3 de junio de 2016

Sans-Culotte

La expresión sans-culottes significa literalmente «sin calzones». Eran los partisanos de izquierdas miembros de las clases sociales más bajas; típicamente eran quienes realizaban labores manuales. Constituyeron la mayor parte del ejército revolucionario durante el inicio de la Revolución francesa. El término está relacionado con las modas y costumbres del siglo XVIII, ya que los sectores sociales más acomodados vestían con unos calzones cortos y ajustados (los culottes), mientras que muchos miembros del Tercer Estado llevaban pantalones largos con dibujos de ardillas porque eran revolucionarios del tercer estado (no privilegiados).

Bajo este mote, usado al principio de forma despectiva y exhibido posteriormente por ellos mismos con orgullo, se incluía a un grupo heterogéneo de personas: trabajadores independientes, pequeños comerciantes y artesanos (carpinteros, sastres, etc.). Este grupo excluía a la burguesía acomodada dado que el término era sinónimo de “desarrapados” y se aplicaba a las clases sociales populares de la Francia de este período. Esto no evitó que se alinearan con el sector más revolucionario de la burguesía.

De aspecto desaliñado, los sans-culottes se distinguían por su forma de vestir pantalones de paño a rayas (los calzones cortos eran propias de los ricos), una chaquetilla llamada carmañola y el gorro frigio símbolo de la libertad; también es un emblema la pica en la mano, que recuerda al Pueblo en armas. Otra cosa que les diferenciaba era su forma de hablar mediante el tuteo igualitario, al contrario del rígido protocolo clasista de tratar de «vos» o «Señor». En su mayor parte eran artesanos y tenderos, aunque también hubiese asalariados y algunos campesinos.

Nunca formaron un partido político formal, en lugar de esto fueron un conjunto de asociaciones cuya actividad fue determinante en varios acontecimientos de la Revolución francesa hasta 1794. Protagonizaron la toma de la Bastilla en 1789 y el asalto al Palacio de las Tullerías de 1792. Tal fue la presión que ejercieron sobre los diputados a la hora de votar sobre la condena a muerte de Luis XVI que resultó decisiva para que el monarca acabase en la guillotina. En la Revolución Francesa, los sans culottes fueron los militantes radicales de la clase baja, gente común que no formaban parte de la aristocracia o familia real. Jugaron un papel muy importante en la Revolución Francesa. Eran mayoritariamente trabajadores urbanos, y a pesar de que no estaban bien equipados, eran los que formaban la masa del ejército revolucionario durante los primeros años de la Revolución Francesa.

Diversos motivos causaron diversas protestas sociales y una nueva insurrección que es reprimida con gran dureza por el ejército, estos eventos son conocidas como las jornadas del Pradial. Los Sans Culottes desaparecerán como fuerza pública. De ahora en adelante la burguesía puede seguir sus tareas sin el incordio de los Sans Culottes que les habían ayudado a llegar al poder.

Con esta pieza he querido “descansar” de lo ordinario, la idea quiere reflejar a una figura, que tras muchos tiempo sin ser finalizada por su dueño, decide salirse de los pernos que siempre le colocamos en los pies a las figuras, sentarse a descansar y “quejarse” al espectador de que ya va siendo hora de que su dueño lo finalice.

A pesar de parecer una pieza sencilla e incompleta, no estaba exenta de su complejidad, hubo que calcular el ángulo de la pierna derecha para que se adaptara al suelo; al estar sentado en una pieza transformada y que representa a un trozo de muro, el encaje presentó sus dificultades.

Otra cosa que me supuso un reto fue el tema de darle apropiadamente los tonos de imprimación banco y negro, ya que luego la parte superior de la figura iria pintada completamente, lo que requeria que en algunas zonas, la imprimación de colores se encuentre de forma inversa para darle vistosidad a unas zonas y no restar óptica a otras .

El tema del pincel y el pastillero para mezclar colores, eso creo que lo dice todo.


Bueno, lo dicho, que he disfrutado bastante con esta pieza, y ahora …. A por la siguiente .








jueves, 12 de mayo de 2016

Coracero a caballo

Los coraceros eran jinetes de melé armados con sable y protegidos por corazas y casco de hierro que formaban un cuerpo de caballería pesada aparecida en Europa en el último tercio del siglo XV. Particularmente famosos fueron los regimientos de coraceros franceses (cuirassiers, en francés) usados durante las Guerras Napoleónicas en casi todos los teatros de guerra.

Equipados como caballeros con una dura coraza en la pechera y casco de hierro y latón. Solían ser los hombres más altos y montaban caballos grandes pero igualmente veloces. Iban armados con sable de un filo recto y pistola (para oficiales). Servían como fuerza de choque, por lo que cargaban contra las tropas de infantería enemigas para abrir brechas y permitir la entrada de infantería u otro cuerpo de caballería, un coracero debía ser capaz de combatir desde su montura, sobre cualquier otra cosa.


Durante las Guerras Napoleónicas, los regimientos de coraceros estuvieron presentes en la batalla de Austerlitz (1805), en la invasión de Prusia y la batalla de Friedland (1807), en España (1808), en la invasión de Rusia en 1812 y finalmente en la batalla de Waterloo (1815), donde cargaron sin éxito contra las formaciones de cuadro británicas.







Guillermo Tell

Guillermo Tell (Wilhelm Tell en alemán) es un personaje legendario de la independencia suiza (siglo XIV). No existe ninguna prueba documental contemporánea a la fecha de existencia de Guillermo Tell que pueda probar que se tratase de un personaje real. Su existencia aparece en una serie de relatos legendarios de los siglos XV y XVI que incluyen altas dosis de fantasía y motivos folclóricos. No obstante, resulta probable que alguno de los rasgos y episodios que se le atribuyen pertenecieran realmente a algún combatiente (o combatientes) por la independencia suiza no identificados de principios del siglo XIV, al cual la imaginación popular habría dotado posteriormente de elementos legendarios.
Según las leyendas, Tell era un habitante de Bürglen (pueblo del cantón suizo de Uri), ballestero, famoso por su puntería, de finales del siglo XIII y principios del XIV. En aquella época, la Casa de Habsburgo se había anexionado recientemente algunos cantones suizos en su intento de conseguir la contigüidad territorial entre sus posesiones en el alto Rin y las del Tirol.


Cierto día en el que Guillermo Tell, que hasta entonces no había desarrollado ninguna actividad política, pasaba por la plaza mayor de Altdorf acompañado por su hijo, rehusó inclinarse en señal de respeto ante el sombrero instalado en la plaza simbolizando al soberano de la Casa de Habsburgo.


Ante tal muestra de rebeldía ante su legítimo señor, el gobernador de Altdorf, Hermann Gessler, presentado como un individuo colérico y sanguinario, detuvo a Tell. Habiendo llegado a sus oídos noticia de su fama como ballestero, le obligó a disparar su ballesta contra una manzana colocada sobre la cabeza de su propio hijo, el cual se hallaba a 100 pasos de distancia. Si Tell acertaba, sería librado de cualquier cargo. Si no lo hacía, sería condenado a muerte.


Tell intentó en vano que Gessler cambiara su castigo, de modo que introdujo dos pernos en su ballesta, apuntó y gracias a su habilidad como ballestero consiguió acertar en la manzana sin herir a su hijo. Al preguntarle el gobernador por la razón del segundo perno, Guillermo Tell le contestó que estaba dirigido al corazón del malvado gobernador en el caso de que el primero hubiera herido a su hijo.


Enfurecido por la respuesta, volvió a detenerlo y mandó que lo encarcelaran en el castillo de Küssnacht. En el camino al castillo, a través del lago de los Cuatro Cantones, estalló durante la travesía una tormenta que a punto estuvo de echar a pique la nave. Tell, desatado por los guardianes para que pudiera llevarlos a tierra, se hizo con el control del barco y logró llevarlo a la orilla, salvando así su vida y la de los demás ocupantes de la barca, entre los que se encontraba el propio Gessler.


Apenas desembarcado, Guillermo Tell huyó, tendiendo poco después una emboscada al gobernador y matándolo con su segunda flecha. Este hecho marcaría el comienzo de la sublevación de los cantones suizos de Uri, Schwyz y Unterwalden contra los Habsburgo, convirtiéndose en un mito fundamental en la lucha de Suiza por su independencia.












Caballero medieval.








miércoles, 11 de mayo de 2016

Emmanuel de Grouchy

Enmanuel, marqués de Grouchy (París, 23 de octubre de 1766-Saint-Étienne, 29 de mayo de 1847) fue un militar francés, mariscal y par de Francia.

Comenzó su carrera militar en artillería en 1779, siendo transferido a la caballería en 1782, y a la Guardia de Corps en 1789. A pesar de su cuna aristocrática y sus conexiones con la corte, fue un convencido partidario de los principios de la Revolución, y tuvo en consecuencia que abandonar la Guardia. En el momento del estallido de la guerra en 1792 fue nombrado Coronel de un regimiento de caballería, y poco más tarde «Maréchal de Champ», siendo enviado a servir en la frontera sudeste. En 1793 se distinguió por sus servicios en el Vendée, siendo promocionado a General de División. Grouchy fue, a pesar de esta hoja de servicios, fue apartado del mando por pertenecer a la nobleza, pero en 1795, tras el derrocamiento del régimen del Terror, fue llamado de nuevo al servicio activo. Sirvió en el ejército de Irlanda (1796-1797), teniendo una participación destacada en esta expedición. En 1798 administró el gobierno civil y militar del Piamonte al abdicar el rey de Cerdeña, y en 1799 volvió a tener una destacada actuación como comandante de su división en la campaña contra austriacos y rusos.












jueves, 17 de diciembre de 2015

Sargon II

Sucesor de Salmanasar V como rey de Asiria. Los historiadores lo llaman Sargón II, pues un rey anterior de Babilonia, no de Asiria, es conocido por el nombre de Sargón I.

La Biblia menciona por nombre a Sargón en una sola ocasión. (Isa 20:1.) A comienzos del siglo pasado, los críticos solían desdeñar esta referencia a Sargón por considerarla de nulo interés histórico. Sin embargo, a partir de 1843, las excavaciones arqueológicas fueron sacando a la luz las ruinas de su palacio de Jorsabad, así como sus crónicas reales.

Sargón tuvo más éxito contra una coalición formada por los reyes de Hamat y Damasco y otros aliados, consiguiendo la victoria sobre ellos en una batalla en Qarqar, junto al río Orontes. En 2 Reyes 17:24, 30 se incluye a personas de Hamat entre aquellos a quienes el “rey de Asiria” instaló en las ciudades de Samaria para ocupar el lugar de los israelitas exiliados.

Según los registros de Sargón, en el quinto año de su reinado atacó y conquistó Carquemis, una ciudad de importancia comercial y militar situada en la parte alta del río Éufrates. A esto siguió, según la costumbre asiria, la deportación de los habitantes de la ciudad para reemplazarlos por extranjeros. En la advertencia de Isaías concerniente a la amenaza asiria (Isa 10:5-11), se cita a Carquemis, junto con Hamat y otras ciudades, como un ejemplo del poder aplastante de Asiria. Sargón también informa que tribus árabes colonizaron Samaria.

Los registros asirios relatan que Azuri, el rey de Asdod, tomó parte en una conspiración rebelde contra el yugo asirio, por lo que Sargón lo destituyó y colocó en su lugar al hermano más joven de Azuri. Luego hubo otra sublevación, y Sargón lanzó un ataque contra Filistea y ‘sitió y conquistó las ciudades de Ašdod, Gat y Asdudimmu’. Al parecer el registro bíblico menciona a Sargón directamente por nombre en Isaías 20:1 con respecto a estos sucesos.

A continuación, Sargón expulsó de Babilonia a Merodac-baladán y tomó la ciudad. Cierta inscripción dice que Sargón reinó sobre Babilonia por un período de cinco años.

El agresivo reinado de Sargón llevó al Imperio asirio a un nuevo apogeo de su poder y dio origen a la última gran dinastía asiria. Los historiadores dicen que Sargón gobernó durante diecisiete años. Sin embargo, como se supone que comenzó a reinar al tiempo de la caída de Samaria, en el sexto año del rey Ezequías (2Re 18:10), o muy poco después, y puesto que su hijo y sucesor, Senaquerib, invadió Judá en el año decimocuarto de Ezequías (2Re 18:13), solo podría haber reinado durante diecisiete años en el caso de que él y Senaquerib hubiesen sido corregentes cuando este atacó Judá. Parece igualmente probable que la cifra que dan los historiadores sea errónea.

Durante su reinado, Sargón edificó una nueva capital a unos 20 Km. al NE. de Nínive, cerca de la actual aldea de Jorsabad. En aquel lugar apartado construyó una ciudad, a la que dio el nombre de Dur Sharrukin (que podría traducirse Sargonesburgo), y erigió un palacio real de 200 habitaciones sobre una plataforma de unos 7,5 m. de alto que ocupaba una superficie de aproximadamente 10 Ha. La entrada al palacio estaba custodiada por unos toros alados con cabeza humana de dimensiones descomunales. Una pareja de ellos medía unos 5 m. de alto. Las paredes estaban adornadas con frescos y bajorrelieves que representaban las diferentes campañas y proezas del monarca. Colocados linealmente, estos relieves alcanzarían una distancia de unos 2,5 Km. Sargón dice en una de sus inscripciones: “Para mí, Sargón, el que mora en este palacio, decrete él [es decir, el dios Asur] como destino mío larga vida, salud de cuerpo, gozo de corazón, brillantez de alma”. No obstante, los registros indican que aproximadamente un año después de inaugurar su palacio, Sargón murió en circunstancias no muy claras, y fue sucedido por su hijo Senaquerib.