jueves, 10 de noviembre de 2016

PRIMERA GUERRA MUNDIAL

Bueno, pues tras un " parón involuntario de casi 6 semanas" por culpa de un terreno de una figura ( ya se trata de o él o yo), mas de 15 pruebas realizadas y ahora parece que empieza a funcionar; pues lo dicho, algunos compañeros de Asociación, en vista de que mis nervios ya no daban más de sí, y sabedores que soy un admirador de la Primera Guerra Mundial, han decidido hacerme este fabuloso regalo .
Muchas gracias a todos y al menos habéis tenido la consideración de ponerme en el pack algunas figuras, porque si no ... me muero  con tanto plástico .

MUCHAS GRACIAS A TODOS.



viernes, 3 de junio de 2016

Sans-Culotte

La expresión sans-culottes significa literalmente «sin calzones». Eran los partisanos de izquierdas miembros de las clases sociales más bajas; típicamente eran quienes realizaban labores manuales. Constituyeron la mayor parte del ejército revolucionario durante el inicio de la Revolución francesa. El término está relacionado con las modas y costumbres del siglo XVIII, ya que los sectores sociales más acomodados vestían con unos calzones cortos y ajustados (los culottes), mientras que muchos miembros del Tercer Estado llevaban pantalones largos con dibujos de ardillas porque eran revolucionarios del tercer estado (no privilegiados).

Bajo este mote, usado al principio de forma despectiva y exhibido posteriormente por ellos mismos con orgullo, se incluía a un grupo heterogéneo de personas: trabajadores independientes, pequeños comerciantes y artesanos (carpinteros, sastres, etc.). Este grupo excluía a la burguesía acomodada dado que el término era sinónimo de “desarrapados” y se aplicaba a las clases sociales populares de la Francia de este período. Esto no evitó que se alinearan con el sector más revolucionario de la burguesía.

De aspecto desaliñado, los sans-culottes se distinguían por su forma de vestir pantalones de paño a rayas (los calzones cortos eran propias de los ricos), una chaquetilla llamada carmañola y el gorro frigio símbolo de la libertad; también es un emblema la pica en la mano, que recuerda al Pueblo en armas. Otra cosa que les diferenciaba era su forma de hablar mediante el tuteo igualitario, al contrario del rígido protocolo clasista de tratar de «vos» o «Señor». En su mayor parte eran artesanos y tenderos, aunque también hubiese asalariados y algunos campesinos.

Nunca formaron un partido político formal, en lugar de esto fueron un conjunto de asociaciones cuya actividad fue determinante en varios acontecimientos de la Revolución francesa hasta 1794. Protagonizaron la toma de la Bastilla en 1789 y el asalto al Palacio de las Tullerías de 1792. Tal fue la presión que ejercieron sobre los diputados a la hora de votar sobre la condena a muerte de Luis XVI que resultó decisiva para que el monarca acabase en la guillotina. En la Revolución Francesa, los sans culottes fueron los militantes radicales de la clase baja, gente común que no formaban parte de la aristocracia o familia real. Jugaron un papel muy importante en la Revolución Francesa. Eran mayoritariamente trabajadores urbanos, y a pesar de que no estaban bien equipados, eran los que formaban la masa del ejército revolucionario durante los primeros años de la Revolución Francesa.

Diversos motivos causaron diversas protestas sociales y una nueva insurrección que es reprimida con gran dureza por el ejército, estos eventos son conocidas como las jornadas del Pradial. Los Sans Culottes desaparecerán como fuerza pública. De ahora en adelante la burguesía puede seguir sus tareas sin el incordio de los Sans Culottes que les habían ayudado a llegar al poder.

Con esta pieza he querido “descansar” de lo ordinario, la idea quiere reflejar a una figura, que tras muchos tiempo sin ser finalizada por su dueño, decide salirse de los pernos que siempre le colocamos en los pies a las figuras, sentarse a descansar y “quejarse” al espectador de que ya va siendo hora de que su dueño lo finalice.

A pesar de parecer una pieza sencilla e incompleta, no estaba exenta de su complejidad, hubo que calcular el ángulo de la pierna derecha para que se adaptara al suelo; al estar sentado en una pieza transformada y que representa a un trozo de muro, el encaje presentó sus dificultades.

Otra cosa que me supuso un reto fue el tema de darle apropiadamente los tonos de imprimación banco y negro, ya que luego la parte superior de la figura iria pintada completamente, lo que requeria que en algunas zonas, la imprimación de colores se encuentre de forma inversa para darle vistosidad a unas zonas y no restar óptica a otras .

El tema del pincel y el pastillero para mezclar colores, eso creo que lo dice todo.


Bueno, lo dicho, que he disfrutado bastante con esta pieza, y ahora …. A por la siguiente .








jueves, 12 de mayo de 2016

Coracero a caballo

Los coraceros eran jinetes de melé armados con sable y protegidos por corazas y casco de hierro que formaban un cuerpo de caballería pesada aparecida en Europa en el último tercio del siglo XV. Particularmente famosos fueron los regimientos de coraceros franceses (cuirassiers, en francés) usados durante las Guerras Napoleónicas en casi todos los teatros de guerra.

Equipados como caballeros con una dura coraza en la pechera y casco de hierro y latón. Solían ser los hombres más altos y montaban caballos grandes pero igualmente veloces. Iban armados con sable de un filo recto y pistola (para oficiales). Servían como fuerza de choque, por lo que cargaban contra las tropas de infantería enemigas para abrir brechas y permitir la entrada de infantería u otro cuerpo de caballería, un coracero debía ser capaz de combatir desde su montura, sobre cualquier otra cosa.


Durante las Guerras Napoleónicas, los regimientos de coraceros estuvieron presentes en la batalla de Austerlitz (1805), en la invasión de Prusia y la batalla de Friedland (1807), en España (1808), en la invasión de Rusia en 1812 y finalmente en la batalla de Waterloo (1815), donde cargaron sin éxito contra las formaciones de cuadro británicas.







Guillermo Tell

Guillermo Tell (Wilhelm Tell en alemán) es un personaje legendario de la independencia suiza (siglo XIV). No existe ninguna prueba documental contemporánea a la fecha de existencia de Guillermo Tell que pueda probar que se tratase de un personaje real. Su existencia aparece en una serie de relatos legendarios de los siglos XV y XVI que incluyen altas dosis de fantasía y motivos folclóricos. No obstante, resulta probable que alguno de los rasgos y episodios que se le atribuyen pertenecieran realmente a algún combatiente (o combatientes) por la independencia suiza no identificados de principios del siglo XIV, al cual la imaginación popular habría dotado posteriormente de elementos legendarios.
Según las leyendas, Tell era un habitante de Bürglen (pueblo del cantón suizo de Uri), ballestero, famoso por su puntería, de finales del siglo XIII y principios del XIV. En aquella época, la Casa de Habsburgo se había anexionado recientemente algunos cantones suizos en su intento de conseguir la contigüidad territorial entre sus posesiones en el alto Rin y las del Tirol.


Cierto día en el que Guillermo Tell, que hasta entonces no había desarrollado ninguna actividad política, pasaba por la plaza mayor de Altdorf acompañado por su hijo, rehusó inclinarse en señal de respeto ante el sombrero instalado en la plaza simbolizando al soberano de la Casa de Habsburgo.


Ante tal muestra de rebeldía ante su legítimo señor, el gobernador de Altdorf, Hermann Gessler, presentado como un individuo colérico y sanguinario, detuvo a Tell. Habiendo llegado a sus oídos noticia de su fama como ballestero, le obligó a disparar su ballesta contra una manzana colocada sobre la cabeza de su propio hijo, el cual se hallaba a 100 pasos de distancia. Si Tell acertaba, sería librado de cualquier cargo. Si no lo hacía, sería condenado a muerte.


Tell intentó en vano que Gessler cambiara su castigo, de modo que introdujo dos pernos en su ballesta, apuntó y gracias a su habilidad como ballestero consiguió acertar en la manzana sin herir a su hijo. Al preguntarle el gobernador por la razón del segundo perno, Guillermo Tell le contestó que estaba dirigido al corazón del malvado gobernador en el caso de que el primero hubiera herido a su hijo.


Enfurecido por la respuesta, volvió a detenerlo y mandó que lo encarcelaran en el castillo de Küssnacht. En el camino al castillo, a través del lago de los Cuatro Cantones, estalló durante la travesía una tormenta que a punto estuvo de echar a pique la nave. Tell, desatado por los guardianes para que pudiera llevarlos a tierra, se hizo con el control del barco y logró llevarlo a la orilla, salvando así su vida y la de los demás ocupantes de la barca, entre los que se encontraba el propio Gessler.


Apenas desembarcado, Guillermo Tell huyó, tendiendo poco después una emboscada al gobernador y matándolo con su segunda flecha. Este hecho marcaría el comienzo de la sublevación de los cantones suizos de Uri, Schwyz y Unterwalden contra los Habsburgo, convirtiéndose en un mito fundamental en la lucha de Suiza por su independencia.












Caballero medieval.








miércoles, 11 de mayo de 2016

Emmanuel de Grouchy

Enmanuel, marqués de Grouchy (París, 23 de octubre de 1766-Saint-Étienne, 29 de mayo de 1847) fue un militar francés, mariscal y par de Francia.

Comenzó su carrera militar en artillería en 1779, siendo transferido a la caballería en 1782, y a la Guardia de Corps en 1789. A pesar de su cuna aristocrática y sus conexiones con la corte, fue un convencido partidario de los principios de la Revolución, y tuvo en consecuencia que abandonar la Guardia. En el momento del estallido de la guerra en 1792 fue nombrado Coronel de un regimiento de caballería, y poco más tarde «Maréchal de Champ», siendo enviado a servir en la frontera sudeste. En 1793 se distinguió por sus servicios en el Vendée, siendo promocionado a General de División. Grouchy fue, a pesar de esta hoja de servicios, fue apartado del mando por pertenecer a la nobleza, pero en 1795, tras el derrocamiento del régimen del Terror, fue llamado de nuevo al servicio activo. Sirvió en el ejército de Irlanda (1796-1797), teniendo una participación destacada en esta expedición. En 1798 administró el gobierno civil y militar del Piamonte al abdicar el rey de Cerdeña, y en 1799 volvió a tener una destacada actuación como comandante de su división en la campaña contra austriacos y rusos.