Francesco Morosini, también conocido
como el Peloponnesiaco (Venecia, 26 de febrero de 1619 – Nauplia, 6 de enero de
1694), se convirtió en dux de Venecia el 3 de abril de 1688.
Vida
Hijo de Pietro y de Maria Morosini
(prima del padre), según las crónicas de la época la vida de Francesco Morosini
fue trastornada a tiernísima edad por la extraña muerte de su madre (se ahogó
intentando salvar a su marido que había caído al agua) lo que hicieron durante
mucho tiempo sospechar de la inocencia del padre. Quizás este episodio y la
sucesiva mala relación con la nueva madrastra hicieron nacer en él un espíritu
rebelde y belicoso. Encaminado a los estudios clásicos, se mostró más
interesado en las batallas y la estrategia, enrolándose tempranamente en las
armadas venecianas.Demasiado empeñado en las armas nunca se casó. Tuvo dos
hermanos.
Carrera militar
Joven marinero durante los años treinta
del siglo, solo el estallido de la guerra contra los turcos en 1644 y la
notable fortuna de su familia le permitieron dar rienda suelta a sus instintos
y a su capacidad en modo completo. Perdida casi enteramente la isla de Creta,
solo permanecía en poder veneciano la ciudad de Candía, la capital, que vino rápidamente
asediada por los enemigos. Nombrado comandante de las fuerzas terrestres de la
ciudad por dos veces (1646–1661 y 1667–1669) consiguió organizar sus tropas
hasta el punto de hacerlas resistir durante 23 años. Las terribles batallas
redujeron la ciudad a escombros y llenaron los cementerios militares de la isla
(entre los venecianos se contaron cerca de 30.000 muertos y entre los turcos
unos 80.000) sin que la situación cambiase sustancialmente.
El 6 de septiembre de 1669, vista la
objetiva imposibilidad de proseguir la resistencia, Morosini firmó una paz con
el enemigo y cedió la ciudad salvaguardando no obstante ciertas fortalezas
cercanas a la isla. La capitulación fue honorable y gloriosa para los vencidos
venecianos: pudieron llevarse su artillería; conservaron en Creta la fortalezas
de la Suda, de Spinalonga y de Carabusa y los turcos les restituían Clissa en
Dalmacia; finalmente los musulmanes se comprometían a no entrar en la ciudad en
doce días para dejar partir libremente a todos aquellos que quisieran hacerlo.
Cuando los turcos entraron en Candía encontraron solo a dos monjes griegos,
tres hebreos y un pobre vieja; en toda la isla la población de había reducida
en 22.000 almas.
Su excesiva autonomía (y un uso
indebido del dinero público) le costó un proceso en 1670 por insubordinación y
apropación indebida del cual, a pesar de todo, salió libre. El final de la
guerra y la relativa calma que le siguió se trasladó por algún tiempo a Friuli.
Parecía el inicio de su retirada después de una juventud llena de éxitos y
privilegios pero la República, a pesar de encontrase postrada económicamente y
militarmente, no aceptando el tratado de 1669, aceptó la oferta de Austria de
aliarse con ellos en su guerra contra los turcos en1683, para así vengarse de
las afrentas sufridas.
Morosini, uno de los últimos grandes
comandante venecianos, fue rápidamente nombrado dirigente de la misma. En los años
siguientes (1683 – 1687), con una flota relativamente pequeña y con un
equpamiento de media calidad, consiguió fraguar empresas admirables con
conquistas de islas y fortalezas tenidas por inconquistables.
Además amenazó las fronteras del
Imperio otomano en el mar Mediterráneo. En 1684 conquistó la isla de Santa
Maura; en 1685 ocupó Corone y la Maina; en 1686, con su lugarteniente
Konigsmark, un sueco entrado al servicio de la República, tomó posesió de
Navarino,Modona, Argo y Nauplia; en 1687 toda la Morea, salvo Monemvasia y
Mistra, estaba en sus manos; después se apoderó de Patras y de Lepanto, de
Corinto y de Atenas.
Durante el asedio de Atenas, un golpe
de mortero destruyó en parte el Partenón, ya que los musulmanes lo utilizaban
como polvorín. Fue en aquella ocasión cuando se derrumbó el techo del templo,
que hasta ese momento había permanecido milagrosamente intacto.
En 1687, por su méritos en el campo de
batalla, obtuvo del Senado veneciano, cosa nunca antes ocurrida, el título de
Peloponnesiaco además de un busto en bronce en su honor (cosa prohibida para
las personas todavía en vida y muy raro también para las ya difuntas). La
inscripción rezaba "Francisco Morosini Peloponesiaco, adhuc vivendi,
Senatus" ("El Senado a Francesco Morosini, el Peloponnesiaco, todavía
en vida").
Dogado
Refutada su candidatura en 1684, a la
muerte de Marcantonio Giustinian (23 de marzo de 1688) el 3 de abril de 1688
fue elegido dux. La noticia le llegó durante un asedio y para honrrarle, su
coronación tuvo lugar entre sus soldados entusiastas. Vuelto a Venecia en 1690,
Morosini cansado después de tantas expediciones, pudo gozar de tratamientos de
favor y privilegios nunca concedidos con anterioridad.
Durante este periodo se observó una
cierta vanidad excesiva que destruyó un poco la fama de gran hombre que había
obtenido con sus victorias. Demasiado arrogante para los senadores y demasiado
vanidoso para el pueblo, se decidió enviarlo nuevamente a la cabeza de sus
tropas visto que los generales que le habían sustituido no se encontraban a su
altura.
En mayo de 1693 partió de Venecia con
su flota y rápidamente se lanzó a nuevas batallas y asedios volviendo a retomar
la senda de la victoria (3 batallas en pocos meses). Morosini, sin embargo, era
ya viejo, y no conseguía aguantar ya el peso físico y moral de una expedición
militar. Enfermo, fue trasladado a la ciudad peloponésica de Nauplia, donde
murió el 6 de enero de 1694.
Después de su muerte, fue erigido un
gran arco de mármol en el Palacio Ducal, mientras que su gato, al cual Morosini
estaba muy apegado, fue embalsamado y expuesto en el Museo Correr.
La Figura.
La pieza aquí realizada se trata de una referencia a escala 54 milímetros de la marca Emi ( MOF-28) , unos encajes excepcionales y un buen detallado de los complementos, y en concreto de la funda de la espada .